No es un ecosistema artificial

Un ecosistema es una comunidad de factores vivos y no vivos. Pueden crearse artificialmente y pueden darse de forma natural. Un ecosistema puede clasificarse en sus componentes abióticos, que incluyen los minerales, el clima, el suelo, el agua, la luz solar y todos los demás elementos no vivos, y sus componentes bióticos, que consisten en todos sus miembros vivos. Entre estos componentes hay dos fuerzas principales: el flujo de energía a través del ecosistema y el ciclo de nutrientes dentro del ecosistema.

Por otro lado, los ecosistemas artificiales se crean para copiar las condiciones de los ecosistemas naturales. Ejemplos de ecosistemas artificiales son los huertos, los acuarios domésticos, los zoológicos, los jardines botánicos y los parques. Estos ecosistemas se mantienen gracias a la intervención humana. El ecosistema del acuario y del zoo, por ejemplo, no puede sobrevivir sin el cuidado de los humanos. Los ecosistemas artificiales se crean con fines específicos. Los huertos y las granjas se crean para obtener beneficios agrícolas. Los parques se construyen para el recreo. Los zoológicos y acuarios se hacen para el estudio, el turismo, la conservación, la educación y la afición.

Ecosistema natural

Los ecosistemas, ya sean naturales o artificiales, se basan ambos en los principios cósmicos de la naturaleza. Sin embargo, existen otras diferencias entre estos dos sistemas, como la creación, la finalidad, la diversidad, la susceptibilidad, la sostenibilidad, etc.

El ecosistema natural es el resultado de la constante interacción entre los organismos vivos y no vivos, así como del entorno en el que viven. El ser humano, en cambio, crea ecosistemas artificiales para su propio beneficio.

Los componentes vivos y no vivos de un ecosistema natural trabajan juntos para llevar a cabo procesos biológicos, químicos y físicos esenciales. Por ello, son genéticamente variados y se adaptan a las condiciones ambientales cambiantes. En cambio, el ecosistema artificial es menos diverso y tiene una baja sostenibilidad al carecer de estas operaciones.

Los ecosistemas naturales evolucionan a lo largo del tiempo mediante una serie de ensayos y errores evolutivos sin ninguna interferencia del ser humano. En cambio, el mantenimiento de los ecosistemas artificiales requiere la intervención humana. Por tanto, carecen del proceso de desarrollo evolutivo.

Introducción al ecosistema creado por el hombre

El entorno de un organismo es todo en conjunto: todos los demás organismos y materiales no vivos y físicos que lo rodean influyen de alguna manera en él. Todos y cada uno de los elementos de su entorno son su amenidad. El organismo y cada una de las comodidades (vivas y no vivas) de su entorno están interrelacionadas, cada una de ellas depende de alguna manera de las demás, y el superpoder invisible «Naturaleza», de forma perfectamente calculadora, mantiene el equilibrio entre todos estos elementos. Este complejo sistema de interacciones y redes se denomina «Ecosistema», por ejemplo, ecosistema acuático (ecosistema marino, salobre y de agua dulce), ecosistema terrestre (bosque, pradera, etc.). En cada ecosistema, la tierra, el agua y el aire, que sirven como fuentes de servicios, son fijos y limitados, por lo que tienen una capacidad de carga limitada.

A continuación, los términos ecosistemas naturales, seminaturales y artificiales. Por «ecosistema natural» se entiende un ecosistema no alterado de forma perceptible por el ser humano. Por «ecosistema seminatural» se entiende un ecosistema que ha sido alterado por la acción humana, pero que conserva importantes elementos autóctonos. Un ecosistema artificial es un sistema creado por el hombre de plantas, animales y personas que viven en una zona junto con su entorno.

Diferencia entre ecosistema natural y agroecosistema

El entorno de un organismo es todo en conjunto: todos los demás organismos y materiales no vivos y físicos que lo rodean influyen de alguna manera en él. Todos y cada uno de los elementos de su entorno son su amenidad. El organismo y cada una de las comodidades (vivas y no vivas) de su entorno están interrelacionadas, cada una de ellas depende de alguna manera de las demás, y el superpoder invisible «Naturaleza», de forma perfectamente calculadora, mantiene el equilibrio entre todos estos elementos. Este complejo sistema de interacciones y redes se denomina «Ecosistema», por ejemplo, ecosistema acuático (ecosistema marino, salobre y de agua dulce), ecosistema terrestre (bosque, pradera, etc.). En cada ecosistema, la tierra, el agua y el aire, que sirven como fuentes de servicios, son fijos y limitados, por lo que tienen una capacidad de carga limitada.

A continuación, los términos ecosistemas naturales, seminaturales y artificiales. Por «ecosistema natural» se entiende un ecosistema no alterado de forma perceptible por el ser humano. Por «ecosistema seminatural» se entiende un ecosistema que ha sido alterado por la acción humana, pero que conserva importantes elementos autóctonos. Un ecosistema artificial es un sistema creado por el hombre de plantas, animales y personas que viven en una zona junto con su entorno.

Por Nerea Pico

Bienvenid@, soy Nerea Pico. Te invito a leer mi blog, soy una apasionada de la naturaleza.